Hospital Materno de San Pablo está abarrotado e improvisan espacios

Camas que no alcanzan y que en ocasiones son compartidas por dos personas, sillas que sirven de sitio de espera, colchones que deben ser cambiados, un mamógrafo que no funciona hace cuatro meses. Esta es la realidad del día a día en el Hospital Materno Infantil del barrio San Pablo. El jefe de obstetricia del San Pablo, doctor Rubén Ruttia, admite que el hospital se encuentra colapsado. Revela que en esta época del año los centros asistenciales periféricos cuentan con menos personal por vacaciones y derivan los pacientes al Materno de San Pablo. La propia reducción de trabajadores en este nosocomio debido al descanso anual y el aumento de pacientes hace que al día se tenga un promedio de 12 nacimientos. Dentro de los alumbramientos existen pacientes que se quedan más días de lo previsto por diversas causas. Esto conlleva a sobrepasar las 36 camas que se tienen disponibles para internación. Debido a la alta demanda, las embarazadas deben de esperar en sillas hasta que se libere el espacio, ya que la sala de espera actual es muy pequeña. (Última Hora – 3 de marzo de 2017).